Una vez más el CEO de eMarketer comparte con nosotros siete predicciones de cara al año próximo (y subsiguientes). Veamos qué podemos esperar del mercado estadounidense:
- Continuará el trasvase de inversión de medios tradicionales a digitales.
- La inversión no volverá a alcanzar los niveles pre-recesión. ¿Motivos?
- Las mejoras en los sistemas de medición intensificarán la demanda de acciones de menor coste y mayor eficiencia.
- La fragmentación de los medios obligará a dirigirse a nichos de mercado.
- La tecnología pone al alcance de cualquiera numerosas posibilidades que no requieren inversión publicitaria.
- En contraposición, la importancia del reconocimiento de base social seguirá acrecentándose.
- Descenso de inversión, incremento de contenidos. Además, estos contenidos prestarán cada vez más atención a distribución, personalización y contextualización.
- La publicidad será cada vez menos relevante para la generación de contenidos. En sus propias palabras: «Advertising will by no means go away, but it will play a smaller role as paid content and hybrid models emerge».
- La publicidad en redes sociales nunca atraerá una cuota significativa de los presupuestos publicitarios. Las conversaciones asumirán el protagonismo.
- La cantidad de impactos irá perdiendo relevancia a favor de la calidad de los mismos.
- La publicidad como interrupción, no deseada, tenderá a desaparecer.
Obviamente esto no es -ni pretende ser- una traducción literal. Tras esta aclaración, añadiré que ninguna de las predicciones del Sr. Ramsey me parece sorprendente, se trata de un resumen de lo que todos venimos observando en los últimos tiempos. Eso sí, me gustaría incidir en un punto, el dedicado a la inversión en redes sociales.
Por una parte, estoy totalmente de acuerdo con su apreciación, dudo que consigan atraer una inversión publicitaria significativa (en relación a otras acciones). Por otra parte, creo que el marketing, tal y como lo hemos conocido, va a desaparecer; y esto va a producirse, en gran parte, gracias al influjo de la redes sociales, pero no de las redes sociales generalistas, sino de las especializadas. ¿Por qué? Por su poder prescriptor, por su potencial para evaluar y recomendar. Sobre este tema volveré más adelante, porque creo que tiene importancia suficiente para ello.
Entretanto… vayamos pensando en 2010.