En los tiempos que corren la proliferación de herramientas en la red es exponencial. Probablemente pocas sean realmente disruptivas, pero las hay. Y es probable que, antes o después, nos veamos en el brete de tener que argumentar para convencer alguien del interés de una de estas herramientas, incluso a nivel organizacional.
Un ejemplo puede ser Slideshare. Quizás tengamos muy claro que tiene un gran potencial, pero ¿os habéis parado a pensar cómo defenderlo? Yo ya he tenido que hacerlo.
¿Ventajas de Slideshare? En cierto modo es como comparar el alojar un vídeo en You Tube o en la web de la empresa. En You Tube va a recibir más tráfico, eso seguro.
Entrando en detalle:
- Su interfaz, optimizada para la visualización de presentaciones (permite verlas en pantalla completa, por poner un ejemplo). Además, permite la sincronización de audio (por ejemplo se podría grabar una explicación para sincronizarla con el contenido de cada presentación).
- Incremento de visibilidad, ya que permite búsquedas. Así, cuando un usuario realiza una búsqueda que coincide con los contenidos de la presentación puede visualizarla. De todos modos también se puede compartir «en privado» con usuarios seleccionados.
- Mediante las búsquedas hay una opción, de pago, para generar contactos comerciales. La idea es sencilla, si un usuario busca información relacionada con la presentación, visualiza la presentación y le interesa, se despliega una ventana para que contacte con la empresa.
- Slideshare permite que las presentaciones puedan ser insertadas en otras webs beneficiándose de su interfaz.
- Si se autoriza, los usuarios pueden descargarse la presentación.
Si la idea es que las presentaciones sirvan de promoción es una buena forma de darles más visibilidad, eso seguro.
Todo esto sin olvidar que siempre se puede recurrir a tutoriales, vídeos, experiencias de terceros… ¿más sugerencias?