Aunque a estas horas estoy ya francamente cansado voy a hacer un esfuerzo por dedicar unas líneas a la jornada de Online Marketing Expo de hoy, tal y como hice ayer. De nuevo en tres puntos.
Lo cierto es que me dio mucha rabia no llegar a tiempo para presenciar toda la intervención de Carlo D’Asaro Biondo, pero tenía cita a las 10:30 h. para realizar algunas gestiones administrativas (de ésas que tocan cuando uno cambia de lugar de residencia). Tan sólo pude disfrutar del último tercio de la presentación del Vice president Southern and Eastern Europe, Middle East and Africa de Google y debo confesar que… no tuvo desperdicio. Soy consciente de que las comparaciones son odiosas, pero menuda diferencia con el enfoque de Diego Oliva de Facebook en la jornada de ayer. Y, todo sea dicho, no sé si el equipo de OME piensa poner las aportaciones de los diferentes ponentes a disposición de los interesados, pero si aún no lo han considerado seriamente creo que deberían hacerlo.
Me gustaría subrayar la presentación de Víctor Puig, titulada «¿Rentabilizas tus notas de prensa en Internet o tiras el dinero?». El motivo es que que Víctor demostró conocimiento sobre la materia y una concienzuda preparación: desde la selección del material al tono de la exposición, desde ajustarse al tiempo previsto a la búsqueda de ejemplos adecuados. Incluyo su presentación a continuación, un trabajado esfuerzo de síntesis con el objeto de lograr transmitir cinco ideas fundamentales para todo aquel que genere contenidos en la red.
Por último no me parecería justo dar por finalizadas estas exiguas impresiones sobre la jornada de hoy sin destacar también «El Poder de la recomendación», todo un alarde de sentido común gentileza de Ángel Mª Herrera. Recuerdo haber leído una entrevista suya sobre Bubok y esta mañana tuve ocasión de confirmar lo que ya pude intuir en su momento: que es mejor no perderlo de vista porque va a dar de qué hablar. Y para bien, si no me equivoco. En cuanto al tema que abordó, los influenciadores, decir que va a ser cada vez más importante; el pasado mes de octubre le dediqué una breve entrada y alguna más caerá en el futuro, eso seguro.
En fin, me he quedado con ganas de más. Y eso está bien.